En estos últimos días están circulando en redes sociales videos de venezolanos que se refieren en términos racistas y clasista hacia los ecuatorianos. La primera una chica que vende helados, el otro video la reportera del programa En Corto y finalmente, los obreros del Metro de Quito que reclaman por el exceso del personal extranjero.
Sobre los videos en cuestión se puede argumentar un montón de cosas desde diferentes enfoques y experiencias. En este texto solo mencionaré los riesgos y las responsabilidades de difundir contenidos en la redes digitales.
En el caso de la venezolana, una comerciante informal de helado, que llama feos e indios a los ecuatorianos, sin duda tiene algo de responsabilidad en las palabras que expresa. ¿Y la otra mitad de la culpa dónde está? Pues considero que está en el “reportero” ¿En realidad qué busca el “entrevistador”? ¿Conseguirá que alguna venezolana diga que los ecuatorianos son guapos? ¿Hace humor? La tarea de conseguir un argumento favorable hacia el ecuatoriano resulta imposible. No lo consigue nunca. Pero él también cae en ese juego de referirse en duros términos a los suyos cuando hace referencia a la “María”.
Mil preguntas pueden hacerse. Por ahora es suficiente. Pero antes de eso hay que detenerse y pensar sobre las consecuencias que un video casero publicado en redes puede provocar. El objetivo del video pudo ser el más sano, inocente y divertido pero causó efectos contrarios y hasta polémicos. Seguro el “reportero” luego de este “éxito” contará con miles de reproducciones en su video y habrá ganado visibilidad, pero con un costo alto que no imaginó. Avivó y materializó la xenofobia.
El segundo vídeo es sobre la reportera de En Corto (Un programa de TV de Teleamazonas dedicado al humor). Se supondría que se trata de una “profesional” que sabe los efectos de la comunicación y aun así realiza un vídeo donde critica la seguridad, y la manipulación de alimentos en personas que realizan comercio informal en las calles de Quito. En este caso se evidencia un odio de clase. La pregunta que surge es ¿Por qué realiza este tipo de video? ¿No sabe la magnitud de las palabras en la redes? ¿No sabe que por este tipo de contenidos pagan justos por pecadores?
A ciencia cierta se desconoce sobre la fecha del video de la reportera de En Corto, pero lo que sí es seguro es que este video y otros que aparecen a diario sobre las burlas y respuestas entre venezolanos y ecuatorianos solo sirve para aumentar aquella fiebre xenofóbica y discriminatoria.
Estos casos deben servir para mirar como simples videos caseros alcanzan una magnitud sin precedentes cuando son publicadas en las redes. Desde un dispositivo móvil tomar una fotografía y grabar un vídeo para consumo interno se pueden permitir ciertas licencias; pero si va ser difundido en redes hay que tener un extremo cuidado porque se desconoce la educación, la cultura, o la experiencia de las personas que reciben contenidos desde la redes.
Como lección se debe rescatar que cada uno es responsable de las cosas que publica en sus redes y aquello trae siempre consecuencias (positivas o negativas), porque ahora todos somos como una especie de medio de comunicación donde cada palabra, foto o video están siendo evaluados. Así que siempre deténgase y piense antes depublicar un contenido en redes, tal vez las consecuencias salgan de sus manos.
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