Por: LEFC @ELDIRCOMQ
En nuestra era del conocimiento los seres humanos poseen infinitas formas de conocer la realidad. De esa misma forma se crean imágenes sobre temas muy diversos y variados, donde debajo subyacen personas e instituciones que son observadas y valoradas. Y este proceso de observación y valoración se hace a través de la imagen. Pero ¿qué es una imagen? ¿A qué nos referimos cuando utilizamos la palabra imagen?
En nuestra vida diaria es casi normal escuchar frases como: “esa persona tiene buena imagen”, “tal empresa tiene una pésima imagen” o “la imagen del presidente cada vez baja”. Es evidente que nos referimos a cosas diferentes, y por esa razón hay que comenzar manifestando que la palabra imagen es polisémica, por lo que tienen gran variedad de significados.
Uno de los primeros conceptos de la palabra imagen es la relación la ficción. El argumento que sostiene este concepto era que la imagen de un objeto, persona o institución era algo creado, construido para lograr un determinado fin. Como diría Platón la función de la imagen es de “hacer creer al observador, colocado ante la imagen que está en realidad ante su referente y no ante su copia”. Se sostenía que la ambición con la imagen “ha sido la del engaño a los sentidos y a la inteligencia”. De allí proviene el prejuicio de considerar a la imagen como ficción.
Otro concepto que viene de la palabra imagen es como representadora visual de la realidad, la idea de imagen-ícono. Es decir, imágenes que podemos percibir a través de nuestros ojos de algún objeto que no está presente en ese momento. Un ejemplo de esta imagen-icono es la fotografía pues representa a la persona que está en la fotografía. Esta idea tomó fuerza y se pensó que la imagen es "lo que se ve" de una persona u organización. Este concepto es bien aprovechado por los diseñadores gráficos.
Y finalmente, el concepto de IMAGEN-ACTITUD como representación mental, concepto o idea acerca de una objeto o persona. Es un concepto desde la sicología que hace referencia a que es una representación mental que nos hacemos en la cabeza del objeto, persona o institución, más no es el objeto como tal, sino una evaluación que hacemos de él. Esta evaluación es fruto de nuestra percepción, por lo cual le otorgamos ciertas características con las que definimos y diferenciamos de los demás objetos. Lo más importante de esta evaluación implica una valoración, una toma de posición con respecto al objeto, y en consecuencia una forma de actuar en relación con él. Es así que, cuando acudimos a comprar algún producto o servicio, en nuestra cabeza evaluamos nuestras experiencias, emociones y acciones para tomar las decisiones.
De esta forma, el concepto de imagen que se estudia en la planificación de la imagen en las empresas o instituciones es el de imagen-actitud, es decir, imagen “la representación mental de un estereotipo de un objeto, organización, persona o acontecimiento, que los públicos se forman como consecuencia de la interpretación de la información acerca de aquellos” (Capriotti, 2006).
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